Las personas felices están completamente conscientes que lo único que tienen es el presente, los bienes materiales llegan a ser tan obsesivos que pueden apoderarse de las personas, nosotros no poseemos las cosas, las cosas nos poseen a nosotros.
Lo único que realmente nos pertenece es nuestra propia vida, el pasado no lo podemos modificar y nadie puede adivinar el futuro, debemos estar conscientes que el presente es nuestro mayor patrimonio, Dios perdona, el tiempo no, es por eso que las personas felices se dedican a vivir su aquí y ahora sin dejar de proyectar su futuro, disfrutan apasionadamente su día, su pasión por vivir lo distingue de los demás, para ello no hay oportunidades pequeñas, ni existen días comunes y corrientes, se entregan a cada momento con pasión total, desea vivir tan intensamente como intensamente pasa el tiempo pues ni un solo instante pasado podría nunca regresar.
Hay que vivir la vida intensamente aquí y ahora, pues de tanto pensar en el futuro se pueden quedar en su intento sin mañana y sin hoy, lo único real es el presente, aun cuando todos debemos tener un proyecto y debemos luchar por realizar, sin embargo siempre corremos el riesgo de dejar pasar el presente el momento de ser feliz es ahora debemos aprender a vivir en el presente pues mucha gente vive tan angustiada por el futuro y con tantas cargas del pasado que se pueden graduar en el arte de no vivir.