Este estado, se alcanza cuando ya trabajas en el recuerdo de ti mismo.

En este estado ya estás observándote. Ya comienzas a trabajar en el auto recuerdo, ya comienzas a saber quién eres.

En este estado de autoconciencia, es el impulso de la voluntad lo que te ayuda a realizar el esfuerzo.

La voluntad es la que te hace esforzar te y aplicar la atención dentro y fuera de ti. En este nivel ya se está despierto, de aquí en adelante cambia por completo tu forma de mirar la vida. 

Ya estás preparado para servir a tus semejantes, ya entendiste que es importante cumplir con la misión para la cual naciste, haciendo uso de todas tus virtudes.

Cuestionario para el tercer estado Contéstate “si” o “no”.
l. ¿Has notado que ya pones atención en lo que piensas, sientes y haces, no olvidas las citas y cometes menos errores?

2 ¿Ya te observas como si te miraras desde afuera y cuando algo te molesta intentas entender la causa sin disculparte ni culpar a nadie?

3. ¿Acaso has recuperado tu sentido de admiración por lo que vives, por lo que te rodea, por lo que sucede? ¿Intentas aprender, agradeciendo a Dios estar vivo el día de hoy?

4. ¿Le estás dando valor a las cosas positivas en tu vida, te quejas menos?

5. ¿Sabes hacia dónde quieres llegar, ya visualizas tus metas y planeas cómo lograrlas?

6. ¿Ya te observas -físicamente-, razonas el sentimiento que te producen tus experiencias y te das cuenta de cuál es la causa de tus nervios y qué es lo que te provocan?

7. ¿Ya aplicas la voluntad en tus actos, al omitir la frase: “Es muy difícil”?

8. ¿Ya posees voluntad para cambiar hábitos negativos de comportamiento, cumpliendo con una dieta, dejando de fumar, etcétera?


Conclusiones del tercer estado.
Si contestaste “sí” a seis de estas ocho preguntas, felicidades, ya estás trabajando para despertar a la Conciencia.

Ya te das cuenta de que estás vivo y que tienes en ti el poder de la voluntad para decidir hacia dónde vas y qué deseas ser.

Ya te observas con concentración, cuando alcanzas este estado, tus momentos de Conciencia duran más, pues vives en el presente con atención.

Tus reacciones inconscientes por ejemplo, el enojo, ya no son tan frecuentes, dado que te das cuenta, te controlas y razonas, ya no vives de mal humor.

En este estado entiendes que cada uno de tus centros, el físico, el emocional y el intelectual tienen memoria, y grabas en la memoria tus experiencias, ya tienes recuerdo de ti mismo y usas la intención adecuada en lo que quieres lograr.